poster no hables con Extraños

Crítica de No Hables con Extraños (Speak No Evil)

Duración

1h 45m

Calificación

6,5/10

¿Es buena No "Hables con Extraños" (Speak No Evil)?

Imagina estar en una situación donde la falsa educación te lleva a ignorar todas las señales de peligro. Es ese momento en el que te dices a ti mismo: «Esto no parece una buena idea», pero sigues adelante porque… bueno, ¿Cómo vas decirle que no a alguien que te propone lo que parece un buen plan? La tensión se acumula, y en el fondo sabes que algo terrible está a punto de suceder. Así es como empiezan algunas de las peores pesadillas que puedes tener mientras duermes, y también cómo se construye la narrativa de «No hables con extraños» (2024).

La película, un remake de «Speak No Evil» de 2022, plantea una historia similar a la de su predecesora, pero decide tomar ciertos caminos diferentes, analicémoslos.

Una historia que ya conocemos

La película «No hables con extraños» parte de una premisa tan perturbadora como interesante, heredada directamente de su predecesora, «Speak No Evil». En esencia, la historia sigue siendo la misma: una familia es invitada por otra que conocieron en vacaciones a pasar el fin de semana en su casa en mitad del campo, solo para encontrarse con una situación tan incómoda como peligrosa. Sin embargo, lo que en la versión original era una tensión ascendente que se cuece a fuego lento, aquí nos encontramos en una montaña rusa algo más convencional, con algunos giros que buscan impresionar, pero que en ocasiones se sienten algo más forzados.

James Watkins, sabe cómo generar suspense, pero aquí parece ceder ante el estilo hollywoodense más directo. Si bien logra momentos de tensión efectiva, a menudo prefiere optar por una narrativa más visual y explícita, en lugar de permitir que el malestar psicológico se cocine lentamente como en la película danesa.

El Factor James McAvoy

Si hay algo que realmente eleva esta versión es la actuación de James McAvoy. Su papel como David es escalofriante y convincente. Este actor ha demostrado una evolución impresionante, desde su participación en películas como «Las Crónicas de Narnia» hasta sus roles más extremos como «Split» el actor ha ido creciendo y mejorando sus dotes actorales, hasta llegar a películas como esta. McAvoy tiene una habilidad única para crear personajes complejos, y aquí su capacidad para transmitir simpatía y miedo es clave. Cada vez que está en pantalla, eleva el material, brindando momentos de genuino malestar.

Su oscura presencia es uno de los elementos más destacados de la película. A veces, su interpretación nos recuerda a Kevin en «Split», pero sin ser tan extrema, es una persona realmente perturbada, y gracias a su actuación, te lo crees. McAvoy aquí juega más con la ambigüedad, lo que resulta escalofriante y, francamente, el mayor acierto del remake.

Su comparación con el remake de 2022

Aquí es donde las cosas se tambalean. La comparación con la original es inevitable, y aunque este remake no es un corta y pega, se siente la pérdida de la tensión sutil y acumulativa que caracterizó a la película de 2022. Donde la versión danesa jugaba con la incomodidad social y el suspense psicológico, «No hables con extraños» a veces se apoya demasiado en los sobresaltos y momentos obvios de conflicto.

Además, la química entre los protagonistas es menos efectiva en esta versión. La relación entre las dos familias se desarrolla de forma más apresurada, y algunos diálogos que deberían alimentar la tensión se sienten más planos. Lo que en «Speak No Evil» era una atmósfera opresiva, aquí se diluye en un ritmo más acelerado y, en consecuencia, menos efectivo para aquellos que buscan ese malestar latente que no sabes de dónde viene.

Si lo analizamos fríamente todo esto es algo normal. En estos tipos de adaptaciones, la historia ya la conoces, por lo que el director quiere (y necesita) llamarnos la atención mostrándonos otra forma de contar la historia, casi podríamos considerarla una continuación de la versión original.

La mezcla de las dos películas sería la clave

Si se pudiera combinar lo mejor de ambas películas, estaríamos ante un thriller prácticamente perfecto. De la versión de 2022, podríamos tomar el tono, la tensión y su manejo más realista del miedo social. Del remake de 2024, podríamos quedarnos con la actuación magnética de McAvoy y el refinamiento visual de algunas escenas clave.

Imagina un thriller donde el suspense psicológico europeo se mezcla con el dinamismo y las interpretaciones de Hollywood. Una película que no necesite apelar al susto fácil, pero que tampoco caiga en una lentitud excesiva. Con un ritmo controlado y las actuaciones más pulidas, podríamos lograr una tensión que escalara de forma imparable, sin perder ni la sutileza ni la intensidad.

Recomendaría "No Hables con Extraños" a

Todos aquellos que disfrutan de los thrillers psicológicos con un ritmo más apresurado. Si eres fan de películas que exploran la incomodidad de las relaciones humanas en contextos inesperados, esta película es para ti. 

Es menos inquietante que la original, pero más accesible para quienes buscan una dosis de tensión sin tener que esperar demasiado. Y si disfrutas del suspense que juega con las normas sociales, este remake te mantendrá interesado. Eso sí, te recomendaría la versión original si lo que buscas es un final muy potente y que te deje con la boca abierta.

 

Si te gustó "No Hables con Extraños" te recomiendo

Funny Games (1997) de Michael Haneke: Este clásico del suspense psicológico europeo también se centra en la invasión del hogar y las dinámicas sociales que desencadenan el horror. 

La Invitación (2015) de Karyn Kusama: Un thriller que, al igual que «Speak No Evil», construye la tensión a partir de la incomodidad social, con un giro final inesperado.

Split (2016) de M. Night Shyamalan: Otra brillante interpretación de James McAvoy que explora múltiples personalidades en un thriller psicológico único.