Portada de la película Boy Kills World

Crítica Boy Kills World

Duración

1h 55m

Calificación

Boy Kills World - ¿Una auténtica sorpresa?

Boy Kills World te deja con la sensación de haber descubierto una auténtica joya, ha pasado desapercibida, pero es una de esas rarezas que parece hecha a medida para los que disfrutan de la violencia desenfrenada, la comedia irreverente y las historias de venganza que no se toman a sí mismas demasiado en serio.

Para mi, esta peli es toda una sorpresa, una mezcla explosiva entre Deadpool, John Wick, y Kick-Ass. Desde el primer minuto, te atrapa con su combinación única de violencia estilizada, comedia oscura y una narrativa de venganza que se desenvuelve de forma tan frenética como emocionante.

La violencia es brutal, pero con ese toque de humor oscuro que hace que te rías mientras dices: «¿Pero qué acabo de ver?», solo digo que no pierdas de vista la escena del rallador de queso. El protagonista, interpretado por Bill Skarsgård (sí, el mismo que hizo de Pennywise en It), es simplemente perfecto en su papel de antihéroe mudo y letal. Su actuación es la columna vertebral de la película y su carisma, aunque más sutil que en otros papeles, te mantiene enganchado desde el primer minuto. 

Aunque el protagonista es mudo, gracias a su forma de hablar al espectador mediante sus pensamientos, rompiendo así la cuarta pared de una forma original, nos deja una gran cantidad de escenas de comedia bastante originales que hace que incluso en esos momentos donde la acción se para, te diviertas.

La música de Boy Kills World es otro punto fuerte. La banda sonora es vibrante y cañera, cada canción fue introducida para elevar las escenas de acción a un nuevo nivel, unas escenas que, por cierto, son una auténtica maravilla. Hay algunas secuencias tan sorprendentes e inesperadas que, honestamente, no sabrás si reír, gritar o ambas cosas a la vez. La película no se corta en ser creativa con la violencia y eso es lo que la hace tan única y entretenida. Es como un videojuego llevado a la gran pantalla, pero uno de esos que realmente te gustaría jugar.

La trama, es una de tantas historias de venganza de las que ya hemos disfrutado antes, pero al menos se reserva un factor sorpresa, que aunque pudiera ser esperado, no deja de salirse de lo convencional para disfrute del espectador y nos deja una de las escenas finales más épicas y entretenidas que recuerdo este año 2024.

Si tuviera que ponerle un pero a Boy Kills World, este sería que, aunque su duración es de 2 horas (y una escena post-créditos); la historia, llegada al final, puede parecer un poco larga, pero nada que no se pueda soportar con la traca final que te deja totalmente satisfecho.

Recomendaría Boy Kills World a

Si eres de los que disfrutan con el humor negro de Deadpool, la precisión letal de John Wick, y la irreverencia colorida de Kick-Ass, mezclada con violencia y un poco de gore, esta película es para ti. Es ideal para esos días en los que quieres desconectar del mundo y sumergirte en una historia que te haga reír, asombrarte y decir «¡Qué pasada!» y que al terminar, solo puedas recordar esos momentazos que te deja la peli sin pensar demasiado en otras cosas.

Si te gustó Boy Kills World te recomiendo

Kingsman: The Secret Service (2014): Una mezcla perfecta de acción elegante y humor británico, con algunas de las secuencias de pelea más creativas que verás.

Hardcore Henry (2015): Si te gusta la acción en primera persona y la locura total, este experimento cinematográfico te dejará alucinando.

Cualquier película de Deadpool: Violencia, gore, humor negro y un protagonista  principal que no para de romper la cuarta pared son algunos de los ingredientes principales de la película más sinvergüenza de Marvel.