6 Episodios
El pasado mes de octubre tuvimos la oportunidad de ver los primeros tres episodios de La Vida Breve en su participación dentro del certamen oficial de South International Series Festival donde consiguió alzarse con el premio al mejor reparto. No es para menos, porque en esta miniserie todos los personajes tienen su momento para brillar y la serie consiguió sacar muchas carcajadas entre los asistentes al pase oficial. A continuación os contamos por qué no os podéis perder la que es la serie española del momento y todo lo interesante que tiene que aportar.
Con La Vida Breve, Cristóbal Garrido y Adolfo Valor, nos presentan una divertida miniserie que narra cómo fue uno de los reinados más cortos de la historia de España, el ascenso al trono de Luis I, mientras lidiaba con el poder regente de su padre Felipe V.
Aquí veremos una audaz reinterpretación histórica de un periodo convulso de nuestro país, donde el drama de época abraza el humor negro y se mezcla con muy buen acierto. Es peculiar el hecho de cómo han escogido facetas de la psicología y sucesos de la vida de unos personajes reales y han dado una perspectiva tragicómica a toda la trama.
Una propuesta llena de humor irreverente, inteligente y actual; donde brilla una dirección detallada en su fotografía exquisita de María Codina y una puesta en escena muy aguda. El reparto principal es pequeño pero espectacular, las interpretaciones de Carlos Scholz y Alicia Armenteros que llenan la pantalla de humor, se mezclan con una audaz Leonor Watling y un atormentado Javier Gutiérrez que colocan una dosis de drama, aportando un equilibrio a una serie que parece ser la joya de la corona de lo que veremos próximamente.
Es esta forma de trabajar también el drama, lo que sorprende de La Vida Breve. Los momentos de intensidad, la imprudencia estúpida que en muchas ocasiones acompaña al poder, lleva a remordimientos, dolor y reproches. La narrativa de esta serie no solo nos regala una sucesión de situaciones hilarantes con algunos personajes histriónicos, sino que entre esas caricaturas se deja entrever la cara más agridulce de unas personas a las que la muerte les está por llegar.
El ritmo, la producción y la dirección de actores brillan en todo su esplendor. La Vida Breve consigue atrapar al espectador con su forma de plasmar a los personajes y sorprende con muchos momentos de gran maestría visual, donde escenas oníricas irrumpen de manera sorprendente y hacen que cada capítulo sea una verdadera delicia.
En resumen, esta comedia antihistórica tiene mucho que ofrecer al gran público y la convierten en una propuesta imperdible, una pequeña joya dentro de las series españolas de lo que llevamos de año.
Con tan solo 6 episodios de 35 minutos cada uno, es una opción ideal para un maratón de fin de semana. Si disfrutáis de las historias de época y de la comedia irreverente, os aseguramos que no os va a defraudar.
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